Lucio Flores Salcedo o Lucio Flores Salcido fue acusado por la Subprocuraduría de Procesos del delito de homicidio calificado, el cual fue acreditado plenamente ante el Juez Duodécimo Penal.
Los agravios presentados por el Ministerio Público durante el juicio ordinario, fueron suficientes para que ese juzgador, con sede en el Reclusorio Preventivo Varonil Norte, condenara también al ahora homicida al pago de 45 mil 400 pesos de indemnización y gastos funerarios.
ANTECEDENTES
El representante social capitalino documentó que el pasado 11 de mayo, Lucio Flores, su concubina y la menor, estaban en el interior del domicilio localizado en calle Ocote, colonia El Molino, delegación Iztapalapa.
Poco antes de la medianoche, el ahora sentenciado le pidió a su pareja que saliera a la tienda a comprar jugos y frituras. El se quedó con la niña. Cuando regresó, la mujer vio a su concubino dando los primeros auxilios a la menor.
Al ver que no respondía, la pareja llevó a la niña al hospital La Pagoda, donde la agraviada fue atendida de inmediato por los médicos, quienes después de algunos minutos informaron que había fallecido. El galeno les hizo firmar un documento para deslindar al sanatorio de toda responsabilidad y les dijo que debían informar a las autoridades correspondientes.
Después de recibir el cuerpo de Norma Vidal, de dos años, la pareja se dirigió a casa para platicar dónde la velarían. El sentenciado se habría negado a ello y envolvió el cadáver con un cobertor. Salieron a bordo del coche verde, Volkswagen, tipo Jetta y matrícula 975-VTF.
Luego de circular por algunas horas y debido a su embarazo, la mujer se quedó dormida y despertó cuando Flores Salcedo detuvo la unidad en paraje de la carretera Toluca-Zitácuaro.
Ahí, el sujeto bajó del carro y después de cavar en la tierra enterró a la menor. La madre no pudo bajar porque el sujeto la dejó encerrada en el coche. Después regresaron a casa.
Dos días después del crimen, la señora aprovechó que su pareja salió de casa y llamó vía telefónica a familiares suyos para comentarle lo sucedido. Acudió entonces a denunciar los hechos ante el Ministerio Público.
El ahora sentenciado fue capturado días después por elementos de la Policía de Investigación adscritos a la Fiscalía Central de Investigación para la Atención del Delito de Homicidio, cuando salía de inmueble localizado en la colonia Los Frentes, delegación Iztapalapa, a bordo de dicha automotor.
Posteriormente se supo que Lucio golpeaba a la nena porque se orinaba y el día de los hechos la pequeña lloraba mucho. Ante ello, el tipo la sentó en los botes de castigo (garrafones de agua cuadrados) y la golpeó con el puño, lo que ocasionó que la niña cayera; se convulsionaba, vomitó y perdió el conocimiento.
Autoridades de la PGJDF solicitaron autorización a sus homologas de los estados de México y Michoacán, y el 15 de mayo se trasladaron a la carretera Toluca-Zitácuaro y en el paraje 128 de Bosencheve fue localizado el cadáver; estaba semienterrado.
La necropsia realizada al cuerpo arrojó que la muerte se debió a contusión de abdomen, riñón derecho contundido con laceración de la arteria renal y formación de hematoma retroperinatal; la víctima presentaba también síndrome de Kempe –niño maltratado.
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