viernes, 22 de julio de 2011

Lectio Divina

Vive Chimalhuacan en bellas artes http://bit.mx/chi mi maestro de yoga me dijo Exodo 20, 1-17
En aquellos días, el Señor promulgó estos preceptos para su pueblo en el monte Sinaí, diciendo: "Yo soy el Señor, tu Dios, que te sacó de la tierra de Egipto y de la esclavitud. No tendrás otros dioses fuera de mí; no te fabricarás ídolos ni imagen alguna de lo que hay arriba, en el cielo, o abajo, en la tierra, o en el agua, y debajo de la tierra. No adorarás nada de eso ni le rendirás culto, porque yo, el Señor, tu Dios, soy un Dios celoso, que castiga la maldad de los padres en los hijos hasta la tercera y cuarta generación de aquellos que me odian; pero soy misericordioso hasta la milésima generación de aquellos que me aman y cumplen mis mandamientos.

No harás mal uso del nombre del Señor, tu Dios, porque no dejará el Señor sin castigo a quien haga mal uso de su nombre.

Acuérdate de santificar el sábado. Seis días trabajarás y en ellos harás todos tus quehaceres; pero el día séptimo es día de descanso, dedicado al Señor, tu Dios. No harás en él trabajo alguno, ni tú, ni tu hijo, ni tu hija, ni tu esclavo, ni tu esclava, ni tus animales, ni el forastero que viva contigo. Porque en seis días hizo el Señor el cielo, la tierra, el mar y cuanto hay en ellos, pero el séptimo, descansó. Por eso bendijo el Señor el sábado y lo santificó.

Honra a tu padre y a tu madre para que vivas largos años en la tierra que el Señor, tu Dios, te va a dar. No matarás. No cometerás adulterio. No robarás. No darás falso testimonio contra tu prójimo. No codiciarás la casa de tu prójimo, ni a su mujer, ni a su esclavo, ni a su esclava, ni su buey, ni su burro ni cosa alguna que le pertenezca".


+ Meditatio

El pasaje que acabamos de leer pertenece a la tradición Yahvista, por lo tanto una de las tradiciones escritas más antiguas. En él, podemos ver que la teología del Pueblo de Dios y su comprensión sobre el misterio de Dios todavía no es totalmente claro, ya que acepta la existencia de otros dioses (cosa que, como sabemos, la tradición Sacerdotal, la más reciente, no acepta pues reconocerá que no hay más dioses que Yavéh), los cuales eran representados por medio de imágenes.

Por otro lado, esta sección es la sección en la que Dios le da a su pueblo la ley, cuyo mandamiento central es: "Adorarás al Señor tu Dios". Y ese Dios es Yavéh, por lo que no debes adorar a ningún otro dios. Ahora bien, con estas dos cosas en nuestra reflexión, podemos entender que lo que Dios quiere no es que no se fabriquen imágenes, sino que como lo dice claramente: No se adoren ídolos, los cuales son la representación de "otros dioses". He querido extenderme un poco en esta reflexión pues con alguna frecuencia nos encontramos con hermanos que acusan a los Católicos de ser "idólatras" por el hecho de tener imágenes (de Nuestra Madre Santísima, de los santos, incluso del mismo Jesús). Estos hermanos, para apoyar su posición, usan precisamente este pasaje que hemos leído. Si leemos con cuidado el pasaje veremos que lo que Dios quiere es ser el ÚNICO adorado y amado(porque además, no hay otro). Un ídolo es todo aquello que le roba el lugar a Dios, todo por lo que somos capaces de cambiar a Dios. Tengamos pues cuidado de no caer en la tentación de los nuevos ídolos como son la televisión, el dinero, el placer, etc.


+ Oratio

Señor, te pido perdón porque yo mismo he sido mi propio ídolo y te he suplantado en repetidas ocasiones con cosas mundanas; he puesto mi confianza en el dinero, en mis bienes materiales, cayendo en el engaño de que entre más posea, más seguro estaré.


+ Operatio

Contemplando un crucifijo, meditaré en que esa imagen es un recuerdo del amor de Jesús por mí que, por obediencia a la voluntad del Padre, murió por mí en la cruz.

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El Evangelio de hoy

Juan 20, 1-2. 11-18
El primer día después del sábado, estando todavía oscuro, fue María Magdalena al sepulcro y vio removida la piedra que lo cerraba. Echó a correr, llegó a la casa donde estaban Simón Pedro y el otro discípulo, a quien Jesús amaba, y les dijo: "Se han llevado del sepulcro al Señor y no sabemos dónde lo habrán puesto".

María se había quedado llorando junto al sepulcro de Jesús. Sin dejar de llorar, se asomó al sepulcro y vio dos ángeles vestidos de blanco, sentados en el lugar donde había estado el cuerpo de Jesús, uno en la cabecera y el otro junto a los pies. Los ángeles le preguntaron: "¿Por qué estás llorando, mujer?" Ella les contestó: "Porque se han llevado a mi Señor y no sé dónde lo habrán puesto".
Dicho esto, miró hacia atrás y vio a Jesús de pie, pero no sabía que era Jesús. Entonces él le dijo: "Mujer, ¿por qué estás llorando? ¿A quién buscas?" Ella, creyendo que era el jardinero, le respondió: "Señor, si tú te lo llevaste, dime dónde lo has puesto". Jesús le dijo: "¡María!" Ella se volvió y exclamó: "¡Rabbuní!", que en hebreo significa maestro. Jesús le dijo: "Déjame ya, porque todavía no he subido al Padre. Ve a decir a mis hermanos: Subo a mi Padre y su Padre, a mi Dios y su Dios ".
María Magdalena se fue a ver a los discípulos para decirles que había visto al Señor y para darles su mensaje.


+ Reflexión

Este pasaje nos ilustra cómo, quien ha tenido una experiencia con Jesús resucitado, se convierte inmediatamente en testigo de la Resurrección y con ello en un evangelizador. La palabra que usa el griego para la acción realizada por María Magdalena al ir a anunciar es "Angelusa" – que viene de "Angel" y que identifica a los "portadores de noticias de parte de Dios". María ha sido capaz de reconocer en ese "jardinero" la presencia real de Cristo. Él la ha llamado por su nombre y ella le ha dicho: Maestro. Mucha gente piensa que pasar una hora delante del Santísimo Sacramento es pérdida de tiempo (algunos ni se lo han propuesto). Es ahí en donde, delante del misterio, el hombre puede llegar a reconocer en ese pedacito de pan la presencia real de Jesús y con ello convertirse también en un "Ángel", en un portador y anunciador de buenas noticias para los hermanos. Necesitamos llenar nuestras oficinas, nuestras escuelas, nuestros barrios de "ángeles", de hombres y mujeres que, como María Magdalena, puedan decir: Jesús está vivo, yo lo he visto y ha cambiado mi vida; lo que hizo conmigo lo puede hacer también contigo.

Permite que el amor de Dios llene hoy tu vida. Ábrele tu corazón.
Como María, todo por Jesús y para Jesús.

Pbro. Ernesto María Caropara rematar fallas en el equipo de Eruviel Ávila - Roberto Calleja Ortega lea mas... http://bit.mx/rco

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